miércoles, 25 de septiembre de 2013

El Luopan 羅盤

Antes de comenzar a hablar del Luopan, debemos de diferenciarlo de la brújula magnética. La brújula magnética según las leyendas, fue creada en tiempos del legendario Emperador Amarillo, sin embargo esa brújula no era lo que conocemos hoy en día como Luopan ni se utilizaba para los cálculos del Feng Shui.

Hasta el periodo de los Reinos Combatientes (475-221 a.C.) las consultas referentes al Feng Shui, tanto de las tumbas de los reyes como para la selección del emplazamiento de templos y palacios, se realizaban mediante los oráculos y no fue hasta el periodo de Han del Oeste (206 a.C.-25 d.C.) que apareció el Luopan como instrumento de medición y cálculo para el Feng Shui.

Este Luopan no era como el Luopan moderno porque no tenía una aguja incorporada montada sobre un eje, sino que tenía una depresión de forma circular en el centro que se llenaba con agua para colocar allí la aguja imantada montada sobre un corcho. Esta depresión circular se denominaba el Pozo del Cielo y es este el nombre con que se conoce hasta el día de hoy a la brújula que se encuentra al centro del Luopan moderno.

El geomante comenzaba la lectura del Luopan colocándose la aguja sobre el entrecejo y recitando una invocación para luego colocar la aguja en el Pozo del Cielo y el primer presagio lo daba el comportamiento de la aguja al caer sobre el agua. De acuerdo a ese comportamiento se determinaba si había agua subterránea o tesoros ocultos bajo la tierra. Luego de ese primer presagio es que recién se tomaba la orientación magnética de la casa para realizar el análisis del Feng Shui de energías estelares.

Aunque en el Luopan moderno la aguja colocada sobre un eje no permite ya realizar todos los vaticinios que se hacían con la aguja flotante, al abrir el Luopan para iniciar la consulta podemos también tener idea de algunas cosas que suceden en la casa porque el comportamiento de la aguja así lo indica.

Lo normal cuando no existe interferencia magnética, un ejemplo muy claro sería cuando se realiza una lectura en campo abierto, es que la aguja de la brújula se vaya deteniendo poco a poco haciendo un vaivén durante más o menos dos o tres segundos; pero cuando la brújula tiene otro comportamiento, puede ser porque existe agua subterránea o porque la casa cuyo frente se va a medir está infestada de presencias yin o fantasmas.

Los fantasmas no existen ya físicamente en nuestro plano y son espectros de energía que para manifestarse en nuestro plano requieren de cierta densidad de energía que los corporice. Es como si proyectáramos una película sobre un ecran, si retiramos el ecran y seguimos con el proyector prendido, igual no veremos la película; lo mismo sucede con los fantasmas, cuando existe cierto tipo de energía en el ambiente se pueden manifestar o quedarse allí con toda comodidad, pero cuando esa energía se disuelve les es muy difícil y a veces imposible el manifestarse.

Como las energías que permiten que los fantasmas se manifiesten están relacionadas a un mal feng shui, y el geomante disolverá gran parte de esas energías si utiliza los métodos adecuados, los fantasmas rechazan el que se aplique el feng shui en el lugar donde se encuentran refugiados y por eso realizan un gasto mayor de energía al interferir en un objeto físico como la aguja del Luopan, pero lo hacen para molestar o impedir que se realice el estudio de Feng Shui.

Por eso el practicante debe estar preparado para cuando sea el caso, y si ve que la aguja tiene un comportamiento extraño que impide que se tome la lectura, debe recitar un mantra para disolver las energías yin que se encuentran interfiriendo con la lectura. Por eso es muy conveniente que el geomante tenga iniciación en el budismo y/o en el taoísmo.

Una práctica muy conveniente y que se puede aprender por autoiniciación, es la recitación del Mantra del Caballero de la Vestidura Blanca; esta práctica es muy poderosa, pero para que adquiera el poder necesario es indispensable que el practicante no deje de realizar la recitación diaria del mantra, la que se recomienda que en un inicio se realice sólo con tres repeticiones por cada serie o sesión, que a la semana siguiente sean siete repeticiones, luego de otra semana se hagan veintiuna repeticiones, al segundo mes cuarenta y nueve repeticiones y al tercer mes las ciento ocho repeticiones reglamentarias para este mantra.

No lo olvide, el Luopan le puede dar una advertencia a tiempo y si usted sigue la advertencia del Luopan y se abstiene de realizar la consulta o realiza las prácticas convenientes para poder proseguir con la consulta, podrá realizar una práctica segura del Feng Shui.

Joseph Cruz Soriano
Centro Tian Long Tan
Astrología China, Feng Shui y Oráculos Tradicionales
http://www.tianlongtan.blogspot.com